miércoles, 10 de abril de 2013

300 metros sobre el político

Escrache. Fuente: Eldiario.es

Últimamente, la palabra escrache está en boca de todos. Pero, ¿qué es? Podríamos definir escrache como una manifestación pacífica ante la vivienda de alguien a quien se quiere denunciar. En este caso, delante de las casas de los políticos del Partido Popular para así denunciar su mala gestión.
Un ejemplo de ello, es el escrache realizado al alcalde de Leganés y diputado regional del Partido Popular en el portal de su vivienda. 


Por ello, el Gobierno español ha decidió reaccionar ante dichas acciones. Esta medida llega por la preocupación de que ese acoso a los políticos se desmorone.
El secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, ha dado instrucciones para que se prohíba la celebración de escraches a menos de 300 metros de las casas de los políticos, como norma general.
Pero, ha habido una controversia porque el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha asegurado que esa distancia no tiene por qué ser de 300 metros, que variará en función de las necesidades y características del lugar. Desmintiendo que no se ha tomado ninguna medida de distancia de seguridad de 300 metros. 

El escrache ha suscitado una polémica en torno a derechos constitucionales. Y es que entran en conflicto el derecho a la intimidad de las personas, porque los políticos también son personas, y el derecho a reunión, a manifestarse. Pero, ¿cual prima sobre cuál? Por ahora, es una respuesta que debe ser delimitada por una orden judicial y no por el gobierno.

Lo que sí queda claro es que en la conciencia de los políticos no hay perímetro de seguridad.

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