¡Cuidado! Políticos en la red

Fuente: Blog Echeverriaybesneir 

Internet ha causado una auténtica revolución, gracias a la red de redes, la esfera pública ha cambiado. Se ha pasado de una sociedad de masas, caracterizada por un modelo de comunicación jerarquizado y unidireccional, a la sociedad red. Una sociedad donde el ciudadano participa en la esfera pública, lucha por una mayor transparencia del poder, con un flujo de comunicación multidireccional.

Este nuevo panorama social, ha influido en el quehacer político. La extensión de los usos sociales de las tecnologías y el nacimiento de la generación de las redes sociales han repercutido en la forma de hacer campañas electorales.

En España, en el año 2000 apenas los candidatos se dejaban ver por la red. Es a partir del atentado del 11-M en Madrid, cuando los políticos ven en Internet un medio de difusión masiva. Con las elecciones autonómicas de 2007, los partidos comienzan a colonizar la red y en las elecciones generales de 2008, empiezan a desarrollarse las redes de simpatizantes de los partidos mayoritarios. Gran influencia en el modo de hacer campañas electorales ha sido el denominado “Efecto Obama”, que pone el énfasis en las redes sociales.

El desarrollo del uso de Internet ha hecho que, cada vez más, lo candidatos tengan que involucrarse en la sociedad red. Ya no sólo hacen campaña cada 4 años, sino que realizan una campaña diaria. Se ha pasado de las denominadas redes viejas, es decir, foros, blogs o videos, a las nuevas redes, teniendo como base Twitter. Ya que esta nueva red social permite asentar el mensaje, tener presencia, que los políticos puedan responder tanto a sus simpatizantes como a sus críticos, y así dar una imagen de igualdad, manteniendo un feedback directo con los ciudadanos.

Twitter se ha convertido en la red social donde los políticos dan a conocer su día a día. Hecho que acapara tantos pros como contras. Y es que la clase política mete mucho la pata en esos 140 caracteres. Por ejemplo, Sigfrid Soria, ex diputado del Partido Popular en Canarias, realizó unos comentarios en relación a los escraches que tuvieron mucha repercusión en Twitter: “Eso sí, como un perroflauta me acose por la calle, me intimide o agreda, la ostia que se lleva ni se la va a creer”.

Otro de los políticos que más revoluciona la red es Toni Cantó, diputado de UPyD, con comentarios sobre que la mayoría de las denuncias por violencia de género son falsas, protagonizando un video mofándose del independentismo catalán,  o sobre el acceso a Internet de los presos “¿Todos los presos tienen las facilidades de Otegi para tuitear y hacer propaganda desde su celda? #pregunto". Comentarios que han hecho que Cantó se convierta en un objeto de burla tuitera.

Estas meteduras de pata, deben propiciar una toma de conciencia por parte de los políticos. No saber tuitear les puede pasar una mala jugada, repercutiendo en sus partidos políticos, echando por la borda la estrategia de comunicación que llevan a cabo. La cuenta de Twitter del político de turno ha de ser personal y manejada por él mismo, para dar una mayor transparencia y cercanía, pero debe ser responsable con lo que expresa en esos mensajes limitados. Ya que estos errores desestabilizan su imagen pública, en detrimento de su reputación.